Ya se acercan los Carnavales, y en toda Eslovenia se celebran por todo lo alto, es tiempo de usurpar personalidades, de cubrirse con histrionicas máscaras, de bailar y por supuesto de disfrutar con el ambiente que se genera en los pueblos y ciudades eslovénas. En Eslovenia todos conocen al Carnaval con el nombre de Pust, su significado pagano nos indica que comienza un nuevo círculo de la Naturaleza, ya que se abandona la estación invernal y pronto comenzará la primavera.
Uno de los más famosos y antiguos es el Carnaval de Kurentovanje en Ptuj, que se celebra desde los años 60 y se vuelca con las raíces más eslavas. Este evento comienza en Enero y finaliza el Miércoles de Ceniza, dónde se entierra al Pust, durante este tiempo las celebraciones son continuas, no cesan las diversas actividades que amenizan a grandes y pequeños. Sin duda los carnavales de Ptuj son una mezcla de celebraciones más occidentales, con gran influencia de sus vecinos venecianos y con el protagonismo de la mitología eslava.
Durante los primeros días los aldeanos acuden a Ptuj ocultándose las caras con máscaras de los más curiosas, de animales del bosque, como los osos, de vacas y gallinas, de ancianos retorcidos…pero hay uno que es único en este país, el Kurent, representa a un dios, algunos dicen que Baco o Dionisio, por su fama de juerguistas, su atuendo es una piel de oveja con cencerros, plumas y telas adornando los cuernos, este esperpento llega a las ciudades azuzando los látigos medievales y provocando estruendos y ruido para hacer saber que ya ha llegado.
Después de los kurent llega una calma aparente y comienzan a desfilar sus habitantes con atuendos florales y divertidos y finalmente concluye con personales grotescos, feos, que hacen que el público se carcajee de tan ridículos fantoches.
Son miles las personas que acuden a Ptuj, de todos los lugares del país así como de otros países, se ha convertido en un evento único, aunque los más viajeros dicen que guarda gran parecido con los famosos carnavales de Rijeka en Croacia.
Otro de los Carnavales más afamados del país es el de Cerknica, desde los alto de las montañas llegan todas las brujas que las habitan, por ello la ciudad se plaga de estos personajes acompañados de sus acólitos diablos, la mayoría de su población participa en los desfilen y cumplen con la tradición encarnando a un gran monstruo que emerge del Lago Jezerko, así como de la Gran bruja Ursula.
Por supuesto que en la Ljubljana también se celebran estas fiestas, pero con un toque más informal, miles de niños y padres se disfrazan, acuden a la Plaza del ayuntamiento, muchos se disfrazan del mítico Dragón verde, emblema de la ciudad, el centro de la ciudad se viste con malabares, comparsas y finalmente también aquí aparecen los Kurents, el ruido inunda la tranquila Ljubljana. Y de repente podréis notar los olores de las sabrosas salchichas eslovenas, carnes a la brasa y demás delicias eslovenas que os llevarán al mercado central, allí normalmente se ubica el mercado al aire libre, en esta zona se coloca un escenario en el que grupos musicales amenizan la fiesta. Después los más jóvenes se dispersan por los pubs y lugares de copas para continuar la celebración.
También en Dreznica tiene lugar un famoso Carnaval, muy antiguo también los jóvenes aún sin casar se cubren con máscaras de madera que ellos mismos se encargan de tallar y se van transmitiendo de padres a hijos, algunas tienen mucha solera. Los habitantes se dividen entre los llamados Guapos y los Feos, los primeros adornan las casas, repartiendo dulces y alegrando a los espectadores.