Conocer Eslovenia a través de su gastronomía es un lujo, por ello son muchos los visitantes que deciden degustar los platos típicos de cada zona, una mezcla de sabores con orígenes austriacos, húngaros y mediterráneos, pero eso sí con el toque autóctono. En cualquier taberna eslovena (Gostilna) encontrarás alimentos como la col, el trigo sarraceno, judías, queso, y carne de cerdo, cordero o ave.
Son muy famosas las sopas de Eslovenia, dependiendo la zona a la que acudamos las degustaremos con diversos ingredientes, algunas son la Sopa Jota, (con repollo, beicon, y costillas), la Minestra (Multitud de verduras), la Ricet (Sopa densa con cerdo), Sopa Stajerska Kisla Juha (con cerdo, cebolla, patatas…)
Los guisos también tienen mucho éxito en toda la geografía eslovena, la mayoría de ellos elaborados con carne de cerdo proveniente de la matanza. Aunque si de algo se sienten orgullosos los eslovenos es de su Zganci, a base de trigo sarraceno y cortezas de cerdo.
Los aperitivos más deliciosos pueden ser el Prosciutto del Carso, un jugoso jamón muy típico en la región, así como el queso Tolminec, muy típico en la zona de Istria, se saborea untándolo previamente en aceite de oliva.
La influencia italiana se observa en algunos platos de pasta como los Idrijski Zlinkrofi, muy similares a los raviolis o los Zlikrofi, una especie de Gnocchis de patata.
Los eslovenos son especialistas en realizar sabrosos postres caseros, como el Polica, una especie de brazo de gitano o el famoso Struklji, un pastel que admite infinidad de variantes. Otro de los protagonistas de los postres es la famosa Gibanica, que podreís degustar en las Gostilnas Eslovenas, cuyos ingredientes son las semillas de amapola, manzana, nueces, queso y pasas, todo ello dividido en capas de una especie de hojaldre. Y por supuesto la Kremna Rezina, muy típico en la zona de Bled.
Muchos de los manjares que hemos citado tienen Denominación de origen, algunos como el queso de Bovec, el Nanoski Sir, o el Tolminec, así como alimentos tan cotidianos como el aceite de oliva extra virgen de Istria o la Miel silvestre de Kocevje.
Pero en Eslovenia, además de la denominación de origen hay otros grupos de alimentos que son los de Indicación Geográfica Protegida, estos son aquellos alguna fase de su producción debe realizarse en un área geográfica concreta y realizarse de forma artesanal. Algunos son el famoso jamón del Carso o Kraski prsut, la panceta del Carso, una especie de carne seca, llamada Kraski zasink.
Otra de sus nomenclaturas es la Indicación de Especialidad Tradicional Garantizada, algunos son los llamados Idrijski zlikrofi, la pasta rellena de patata cocida, el postre Prekmurska Gibanica o un pan redondo caliente que se llama Belokranjska polaca, dorado con huevo batido y sal.
Para acompañar a estos sabrosos alimentos podemos degustar multitud de bebidas elaboradas en la zona, como el aguardiente Slivovica, o los vinos tintos de la Región de Goriska Brda. En otras regiones como Stajerska se elaboran vinos blancos y espumosos.
Los amantes de la cerveza pueden probar rubias como La Unión o negras como La Temno Lasko. Una bebida típica de la zona es el Pinjenec, parecido al Kefir, una especie de yogurt liquido.
Sólo nos queda desearos buen provecho!!